En Canarias tenemos el mejor tiempo, las mejores playas, una gastronomía de impresión… No nos falta de nada, algo que avala el creciente número de turistas que visitan nuestras islas cada año. Pero qué pasa con nosotros, con los residentes. Pues que también nos gustan las vacaciones, el turismo el poder desconectar y salir de vez en cuando fuera de nuestros límites geográficos tan marcados por el mar Atlántico. Así, y con motivo de las fechas navideñas que ya tenemos encima, os recomendamos que aprovechéis aquello de hacer un regalo que vosotros también queréis disfrutar para hacer una escapada. ¿Quién no ha regalado alguna vez un libro a la pareja que también quería leer él mismo? Es una táctica genial, matas dos pájaros de un tiro. Pues bien, lo mismo sucede con los viajes, ya que difícilmente una escapada será romántica si la persona en cuestión va sola.
Desde aquí os proponemos un destino nacional, ya que tampoco es necesario irse a Laponia para desconectar. Barcelona es un lugar ideal, con un clima estupendo todo el año y con un montón de actividades adaptadas a todos los bolsillos.
Lo primero de todo será encontrar el vuelo. Queremos sorprender a nuestra pareja, pero queremos ir por encima de todo, así que además de mirar precios, antes de comprarlo deberíamos ponernos en contacto con alguien de su trabajo para preguntarle cuáles son sus días libres. Si lo hacemos directamente, sospechará, y la sorpresa será un total fiasco. Desde Canarias tenemos muchos descuentos y posibilidades de usar las aerolíneas low cost, así que si lo cogemos con tiempo no nos saldrá excesivamente caro. Una vez tengamos el billete, necesitaremos un lugar donde dormir. En Internet y sin salir de casa es sencillo encontrar alojamiento. Eso sí, un día es un día y lo suyo sería que en lugar de tener en cuenta el precio de la habitación filtrásemos los resultados de búsqueda por un hotel romántico. Los hay incluso que ofrecen paquetes promocionales para parejas, de forma que nos lo organizan todo.
Ya en nuestro destino, os recomendamos que ese primer día os relajéis en Evasiom Spa, un centro de masajes en Barcelona que es todo un santuario para el cuerpo y los sentidos. Aquí podréis disfrutar de tratamientos en los que se han integrado las diferentes culturas en una exclusiva y lujosa mezcla de métodos para que consigáis el bienestar a través de un viaje alrededor del mundo. Inspirados en las tradicionales terapias asiáticas, se utilizan productos cuidadosamente seleccionados para revitalizar y recuperar el equilibrio, así como liberar la tensión y restablecer la paz y la armonía.
Una vez reinstalados el ritmo y el equilibrio en vuestra mente, cuerpo y sentidos, podéis acudir a la zona del puerto a disfrutar de la gastronomía de algunos de sus muchos exquisitos restaurantes. Barcelona es uno de los lugares más conocidos por su grandes chefs, toda una garantía de que comeréis bien.
Asimismo, si os gustan las compras, en Barcelona encontraréis sucursales de las mejores boutiques del mundo, las más lujosas. Pero no solo eso, sino que hay para todos los bolsillos. Esta ciudad es un lugar de contraste, y desde la exclusividad de estas tiendas es posible pasar a los lugares más alternativos.
Las famosas Ramblas son también un paisaje multicultural del que a muchos les gusta disfrutar. Pasear por ellas nos da una idea de lo cosmopolita que puede ser esta ciudad que también es germen de cultura de una arquitectura por la que es reconocida en todo el mundo. Hablar de la Ciudad Condal es hacerlo también de Gaudí y de lugares como la todavía inacabada Sagrada Familia, un templo que se construye a través de las donaciones de los creyentes y visitantes, o del Parque Güell, entre otras construcciones.
Si el tiempo nos acompaña, es posible también navegar en un barco alquilado por la costa catalana o acudir a bañarnos a alguna de las playas de este litoral plagado de banderas azules. Todo es posible para hacer feliz un fin de semana a nuestra pareja es una ciudad tan increíble y completa como esta. Todo dependerá del tiempo que tengamos y del presupuesto disponible.
