Canarias es la segunda comunidad de nuestro país después de la extremeña, donde menos gente lee libros en su tiempo de ocio e incluso es una de las dos en las que el hábito de la lectura ha retrocedido.
Esto es especialmente preocupante en la niñez. Los niños canarios deberían leer más de lo que leen, pues la lectura ayuda a que los niños potencien la imaginación y su desarrollo cognitivo. Es un hecho comprobado que los niños que entran en el mundo de los libros cuando son pequeños, es más fácil que tengan gusto por los libros en etapas más adultos.
Debe fomentarse más aún más la lectura
Existen editoriales como Ediciones Aljibe que ponen su empeño en que los más pequeños, incluso los que tienen dificultades de aprendizaje puedan tener más fácil el acceso a la lectura con sus obras especializadas Esto es un problema que tiene una solución y tanto padres como educadores deben poner la carne en el asador desde los primeros años.
Las empresas editoriales canarias también son conscientes de los datos tan negativos donde solo Extremadura es la que supera a Canarias con un 47,4% de habitantes que nunca lee en sus ratos ociosos.
En los últimos cinco años, son solo la comunidad canaria y la extremeña las que han perdido lectores en los últimos cinco años. En el caso canario ha pasado de un 57,1% al 52,4%. Por el contrario, en el resto de comunidades españolas, los ciudadanos que gustan de dedicar su tiempo de ocio a la lectura ha ido creciendo en estos años.
La media nacional nos dice que cerca del 60% de los españoles suele reservar parte de sus ratos de ocio a leer, donde hay tasas en cuanto a lectura de lo más altas como Madrid (71,4%) o Navarra (65,1%)
El problema de los libros en Canarias no es únicamente de lectura, pues la estadística de los editores canarios los sitúa a la cola a la hora de adquirir libros, sin que se cuenten los de texto. Los datos no dejan lugar a dudas, pues solo un 38,2% de los canarios mayores de 14 años ha comprado un libro en el pasado 2017.
Un dato que es el más bajo en tanto porcentual de toda España, siendo nueve puntos más bajo que la media española. El único dato positivo a este respecto es que los canarios que adquirieron libros en 2017 los compran más que en el resto del Estado, del orden de 9,3 por persona al año frente al 8,6%.
Si vamos a los libros de texto, aquí si que Canarias figura por encima de la media, pues un 33,5% de habitantes compró manuales de estudio frente a la media del resto del país que es del 32,8%. En Canarias hay una elevada calidad de lectores bilingües.
Otros puntos donde destaca Canarias es en que es la comunidad que tiene más lectores que además de leer en castellano leen en lengua inglesa, siendo cinco puntos por encima de la media española, algo de lo más conveniente en una comunidad tan turística. Además sus habitantes son de los españoles que mejor opinión tienen
De las bibliotecas a las que acuden, dándoles una nota de 8,5 sobre 10, la segunda después de los aragoneses que otorgan 8,6 sobre 10. Los datos nos dejan evidente el problema que hay de lectura y el mundo de las empresas editoriales en Canarias quizá lo llevan mejor al también vender sus libros en el resto de España o en América latina, pero no deja de ser un problema el que la población no tenga ese hábito tan consolidado como en otras partes de España.
Las administraciones deberían hacer un esfuerzo para que tanto educadores como padres sean conscientes de que el esfuerzo en edades tempranas puede ayudar a que seamos lectores en el mañana. De la misma manera, entre el público adulto deberían ponerse en marcha mayores campañas de concienciación a este respecto.
Solo así se frenarán las cifras de un problema que al final es cultural, pero también económico, pues las librerías canarias no solo deben de vivir de los libros de texto, la pelota está en el tejado de las administraciones, pero también de nosotros los canarios, pues debemos saber cómo apreciar la buena lectura en nuestros tiempos de ocio.